martes, 28 de septiembre de 2010

El nuevo repunte de China y su impacto en Colombia

El gigante asiático se ha convertido en el segundo destino más importante para las exportaciones colombianas, después de Estados Unidos y desplazando a Venezuela. En las últimas semanas, China ha reportado una nueva serie de datos económicos superiores a lo esperado por el mercado, lo que ha generado una mejora en las expectativas frente a la dinámica de la recuperación de la economía mundial para fin de año. 

Luego de que los datos de la economía china registrados en meses recientes, hasta julio, generaran preocupación en medio de las previas medidas gubernamentales encaminadas a moderar el ritmo de crecimiento, las últimas cifras de balanza comercial, producción industrial y ventas al por menor reportadas en agosto sugieren que la reciente desaceleración de esta economía se habría estabilizado y podría estar ganando dinamismo nuevamente.

  En primer lugar, las importaciones de China en agosto registraron un aumento de 35,2 por ciento a/a, por encima del dato de julio de 27,7 por ciento a/a. La cifra resultó superior a lo esperado por el mercado que estimaba un crecimiento de 27,5 por ciento a/a. El impulso de las importaciones estuvo asociado a una mayor dinámica en el consumo interno de ese país, lo que se reflejó en el incremento de los precios de los bienes importados y en el comportamiento de las ventas al por menor. Las importaciones de petróleo aumentaron 77,6 por ciento en valor y 22,6 por ciento en volumen, lo que generó expectativas frente a futuras presiones en la demanda por crudo. 

En la jornada del anunció del dato de importaciones de China, el precio del petróleo WTI subió 2,9 por ciento. Por su parte, las exportaciones crecieron 34,4 por ciento a/a, en línea con las estimaciones del mercado y por debajo del 38,1 por ciento a/a reportado en julio. Este es el tercer mes consecutivo de desaceleración mensual de las exportaciones. 

Según el Ministerio de Comercio de ese país, este comportamiento seguirá presentándose en lo que resta del año, debido a la menor demanda de los países desarrollados. Adicionalmente, existe el temor frente a las medidas proteccionistas contra las exportaciones chinas por parte de EE. UU. y la zona euro. A final de agosto, el Gobierno estadounidense anunció que planeaba reforzar las leyes comerciales contra algunos países, especialmente frente a China, ya que ese Gobierno estaría subsidiando los sectores exportadores.

En segundo lugar, la producción industrial en China creció 13,9 por ciento a/a en agosto, el mayor avance en los últimos tres meses y superior a las estimaciones de los analistas (13 por ciento). El dato estuvo por encima del 13,4 por ciento a/a de julio con lo que se termina la desaceleración que se venía presentando desde marzo. El avance de la producción industrial no ha estado acompañado de presiones a alza en los precios para los productores. El IPP en agosto subió 4,3 por ciento (el mercado esperaba 4,6 por ciento) frente al aumento de 4,8 por ciento en julio. 

En tercer lugar, las ventas al por menor continúan avanzando, con un crecimiento anual en agosto de 18,4 frente a 17,9 por ciento en julio. Este incremento viene acompañado por una aceleración de los precios al consumidor que subieron en agosto 3,5 por ciento a/a (la mayor variación en 22 meses). Esta alza, que se ubica levemente por encima de la inflación objetivo del Banco Central de China (3 por ciento), estuvo impulsado principalmente por el aumento de los precios de los alimentos. 

Este episodio de aceleración reciente de la actividad económica en China está siendo impulsada principalmente por el renovado incremento del crédito y por los mayores desembolsos fiscales, favoreciendo el crecimiento de la oferta de vivienda y el anuncio de más planes de infraestructura (el Plan de Desarrollo del Occidente). 

Estas políticas han sido generadas por el Gobierno y el Banco Central de China en contraste con el accionar del primer semestre del año, en donde se habían adoptado políticas para moderar el crecimiento de la economía por temor a un recalentamiento de ésta (en vista de los datos de crecimiento del cuarto trimestre del 2009 y el primero del 2001). 

La oferta de dinero (M2) en agosto subió 19,2 por ciento a/a por encima del 17,6 por ciento a/a de julio, lo que se refleja en un incrementó de los préstamos totales que subieron 18,9 por ciento frente a julio (los préstamos a los hogares aumentaron 16,8 por ciento frente al julio). Esto ha impulsado los precios de la vivienda china, llevando a algunos analistas a asegurar que existe una burbuja inmobiliaria en ese país. La inversión inmobiliaria continua manteniéndose al alza: en agosto subió 34 por ciento desde 33 en julio. 

Los mejores datos económicos de China están en línea con el aumento del pronóstico de crecimiento del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía de ese país. En julio lo elevó de 10 por ciento a 10,5 por ciento para 2010, y estimó un avance de 9,6 por ciento para 2011. Este hecho contrasta con el pronóstico de EE. UU. (3,3 por ciento), Reino Unido (1,2 por ciento) y Alemania (1,4 por ciento) para el mismo año. 

Beneficios para Colombia
El nuevo repunte de China podría tener un impacto en la economía colombiana principalmente en tres frentes: i) mayor impulso a las exportaciones colombianas; ii) aumento en el precio internacional del petróleo, que afecta las expectativas de ingresos al país por ese concepto (con el efecto que esto pudiera tener sobre la tasa de cambio y sobre las cuentas fiscales) y que podría generar presiones al alza sobre la inflación de los regulados; y iii) aumento en los términos de intercambio y en la calificación de riesgo de los países latinoamericanos. 

En primera medida, las exportaciones de Colombia hacia China han venido creciendo gradualmente, hasta el punto que ese país se ha convertido en el segundo destino más importante de los productos colombianos, después de EE. UU.

 La demanda de China por productos externos es de gran importancia para el sector exportador colombiano, debido a que compensan parte de la caída de las ventas a Venezuela. Durante el periodo enero-julio las exportaciones de Colombia a China han aumentado 251,5 por ciento en valor frente al mismo lapso en el 2009, y en volumen tuvieron un incremento explosivo, al pasar de 559.000 toneladas el año pasado a 5,5 millones de toneladas entre enero y julio de 2010. En contraste, durante este mismo tiempo, las exportaciones a Venezuela han caído 71,9 por ciento en valor y 65,9 por ciento en volumen frente al 2009.

En segundo lugar, en la medida que la tendencia de la demanda doméstica china continúe aumentando, se incrementarán las presiones sobre los precios de los commodities, de los cuales algunos mineros se encuentran en sus máximos históricos. Esto no sólo se reflejará sobre un mayor valor de las exportaciones colombianas tradicionales (las mineras principalmente), sino también en un posible aumento de presiones sobre los precios de bienes y servicios regulados a nivel local. 

Así mismo, un aumento en la demanda por petróleo y en su precio, elevaría la expectativa de ingreso de dólares al país, manteniendo las presiones a la baja en la tasa de cambio local. Por último y en línea con lo anterior, la calificadora Moody's publicó recientemente un informe donde mostraba que las importaciones chinas de materias primas latinoamericanas han crecido en los últimos 10 años a tasas anuales promedio superiores a 20 por ciento.

 De esta forma, el incremento de los precios de estas ha beneficiado a los países de la región a través de un aumento de intercambio, en medio de la desaceleración de la demanda de los países desarrollados como EE. UU. y algunos de la zona euro. Según la calificadora, un comportamiento similar de forma sostenida le traería beneficios a la calificación de riesgo de los países Latinoamericanos, Colombia entre ellos.

No hay comentarios: